Uno se siente un afortunado cuando tiene la oportunidad de consumir arte, quedarse hipnotizado por las pinceladas del artista y palpar las emociones que generan tales obras de arte. En la tarde de ayer tuvimos el privilegio de vivir esas sensaciones en la sede de ASCEGA con la inauguración de “Observatorio al Aire Libre”, una exposición de obras de la artista coruñesa Lidia Carrión, junto con la de varios de sus alumnos del Taller de Artistas. La inauguración fue acompañada musicalmente por la interpretación de varias versiones por parte del duo “Twin Flames”. Duo formado por la propia Lidia junto con el guitarrista Miguel Thomas.

Cuadros de la exposición y foto de la actuación del duo “Twin Flames”.

Cuadros de la exposición y foto de la actuación del duo “Twin Flames”.

“La pintura y la música fueron la combinación perfecta para lograr representar la multitud de facetas artísticas de Lidia, la inauguración ha sido un acto super emotivo” asegura Carmela Nieto, coordinadora de la agenda cultural de ASCEGA. “Para nosotros, es importante darle un espacio a figuras como Lidia porque ella no solo es artista, es divulgadora. Ella nos solo crea arte, sino también crea creadores de arte gracias a su promoción y enseñanza de la cultura”. Entre los invitados que acudieron a la exposición, destacaron los alumnos de pintura de Lidia, cuyas obras se expusieron junto a las de su profesora. Ayer tuvimos la oportunidad de hablar con una de esas alumnas, Beatriz Riadrigos, que compartió su visión del mundo de la pintura y su experiencia en las clases impartidas por Lidia Carrión.

¿Porqué empezaste a ir a las clases de pintura impartidas por Lidia?

“Empecé porque mi hermana estaba en la Rock School y a partir de ahí, nos enteramos de que Lidia también daba clases de pintura además de clases de canto. Empezamos a ir y nos gustó mucho, llevamos yendo desde antes de la pandemia. Pero incluso durante la pandemia, Lidia nos hizo el favor de continuar con las clases y gracias a eso nos pudimos seguir viendo una vez a la semana”.

¿Te fueron de mucha ayuda las clases durante la pandemia?

“Sí, porque nos servía como una forma de mantener el contacto con las compañeras de clase y de poder desconectar con la situación que estabamos viviendo.

¿Ya pintabas antes o empezaste a raíz de las clases?

“ Siempre me gustó el arte, ya llevaba años pintando en otros sitios pero lo dejé un tiempo por imposibilidad de compatibilizarlo con el trabajo. Cuando me surgió la oportunidad de poder compaginar las clases de pintura con mi horario laboral, lo retomé”.

Beatriz Riadrigos junto a su obra

Beatriz Riadrigos junto a su obra

¿Crees que el arte cuenta con la ayuda y el apoyo que se merece por parte de las instituciones públicas?

“En mi opinión, yo creo que en el arte al final solo se les da visibilidad pública a un número muy limitado de artistas. Por eso, pienso que el arte no está valorado por lo que vale,  cuando alguien desconocido quiere vender un cuadro, la gente no tiene en cuenta las horas de trabajo o el gasto de material. Al Estado le pediría que se inviertan más recursos en dar publicidad a aquellos artistas que están empezando para poder potenciar su carrera, no solamente su obra”.

¿Qué te ha parecido la inauguración y que ASCEGA acoja  eventos como la exposición “Observatorio del Instante”?

“Me ha gustado mucho y me parece muy bien que desde ASCEGA se organicen eventos así porque es una forma de promocionar el arte y el trabajo de Lidia, quien no solo está detrás pintando si no también dando clases”.

En definitiva, el éxito de la exposición confirma una vez más. el interés de la sociedad por la pintura y la música, cultura que desde ASCEGA no nos cansaremos de promover y defender. Como bien hemos declarado en inumerables ocasiones, los artistas son uno de los colectivos más maltratados por el Estado y el peor parados de las restricciones impuestas de la pandemia, pese a la enorme labor que hicieron ofreciendo un espacio de desconexión durante estos años de tanto sufrimiento. Es por ello que durante estos próximos años de recuperación, es imprescindible que desde la sociedad denunciemos las injusticias que sufre este colectivo y podamos difudir al máximo el increíble trabajo que realizan estos artistas. Ya que el arte se encuentra explorando cualquier rincón, analizando cada momento y observando cada instante.