El expresidente no se ha pronunciado sobre la decisión de Maduro de expulsar a la delegación de diputados del PP, ni la prohibición de entrada a varios expresidentes hispanoamericanos que pretendían seguir el desarrollo de las elecciones venezolanas
La Venezuela de Maduro no ha dejado entrar en el país a la delegación de diputados del PP, que se habían desplazado a Caracas a apoyar a la candidatura del opositor Edmundo González. Tras aterrizar, les han requisado por unos momentos los teléfonos móviles, han sido interrogados y, por último, los metieron en un avión de vuelta a España.
Los parlamentarios españoles critican la inacción del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, elegido por Maduro como observador internacional. Tampoco han dejado entrar al país a varios expresidentes hispanoamericanos, todos de derechas, que salían de Panamá. Desde el de Costa Rica, la de Panamá, un expresidente mexicano y también un expresidente boliviano. Todos han calificado a Venezuela como una dictadura. Ha votado Venezuela. Pero aún faltan los 7,7 millones de venezolanos que, según la ONU, han emigrado del país.
Maduro ha expulsado de Venezuela a observadores internacionales para evitar que se comprobasen las graves irregularidades cometidas en el proceso electoral
Personalmente, nada de esto me causa extrañeza, toda vez que el régimen venezolano solo autoriza como observadores a quienes han demostrado “mirar para otro lado” cuando se decide silenciar la voz de los opositores democráticos, llegando a encarcelarlos. Frente a eso, un ciudadano con pasaporte español, pero que tiene en su currículo acciones que para nada defienden la libertad de opinión de otros pensamientos diferentes y su principal valedor se llama Zapatero.
Sí, aquel que se quedó sentado frente a la bandera de una nación que había sido incitada por el gobierno español a la celebración de un acto constitucional. Rodríguez Zapatero es igual que aquellos periodistas que se quedan sentados y callados cuando a otros compañeros de profesión no les dejan ni preguntar ni opinar.
Zapatero no se pregunta por qué casi 8 millones de venezolanos han tenido que marchar de su país por falta de libertad y de futuro
Zapatero vete ya y deja a los países que actúen en libertad y si eres un observador imparcial di la verdad de lo que ves. Ocho millones de venezolanos se fueron por capricho de su país. Pregúntate por qué.
Tu herencia ha dejado la crispación entre nosotros y tu revisionismo histórico se refiere solo a una parte. Revisemos todo y a todos y para ello tu figura no sirve.
Hoy el mundo democrático está asombrado de lo sucedido en las votaciones, pero no pasará nada. Las instituciones mirarán para otro lado y se disculparán con declaraciones vagas y carentes de sentimiento de apoyo al pueblo venezolano y Zapatero afirmará que todo ha sido legal.