Por Jorge Mariño.
En el imaginario colectivo de los vecinos de A Coruña ha quedado instalada la idea de que el gobierno de La Marea generó unas enormes expectativas de cambio. Si embargo, su trayectoria a lo
largo de sus cuatro años de mandato defraudó a miles de votantes y demostró que tenían buenas intenciones, suponemos, pero no supieron gestionar la ciudad. Por eso, entre otras cosas,
Xulio Ferreiro y su equipo perdieron las elecciones municipales de 2019 y llevan cuatro años apoyando las decisiones que toma el gobierno de Inés Rey.
Hoy vamos a responder una pregunta importante que es necesario conocer antes de acudir a la cita electoral del 28M: ¿es posible que el gobierno de Inés Rey haya gestionado peor el ayuntamiento que el gobierno de Marea?
Vamos por partes. Como todos saben, el hasta hora gobierno socialista de María Pita ha dispuesto en estos cuatro años de más de 1.200 millones de euros para gestionar los servicios municipales y mejorar la ciudad. Hay partes de ese presupuesto que “se gastan solas”. Por ejemplo: sueldos de los funcionarios (y de los políticos y asesores), gastos de agua, luz, teléfono, alquileres… Donde se puede analizar la capacidad de gestión de un gobierno municipal es en el capítulo de las inversiones que se
aprueban cada año en el presupuesto municipal. Ese es el termómetro que toma la temperatura de la capacidad de gestión.
Hoy vamos a analizar lo que llamamos el “solomillo” de cada mandato municipal. Descartamos el primero y el último año porque hay un gobierno hasta el mes de mayo y otro diferente a partir de junio y no se puede analizar la responsabilidad de cada uno. Es decir, nos quedamos con los años que cada partido ha gestionado el gobierno municipal: 2012-2013-2014 (PP), 2016-2017-2018 (Marea) y 2020-2021-2022 (PSOE).
En el período que gestionó Carlos Negreira (PP) quedaron sin ejecutar 31,6 millones de las inversiones aprobadas en los presupuestos municipales. Es decir, no se invirtieron una media de 10,5 millones cada año en los barrios, lo que supone que 4 de cada 10 euros prometidos no se destinaron a mejorar la ciudad.
Seguramente podamos pensar que estas cifras se podrían mejorar, pero ahora vamos a comprobar que todavía se puede gestionar mucho peor.
En el período que gestionó Xulio Ferreiro (Marea Atlántica) quedaron sin ejecutar 60,8 millones de las inversiones aprobadas en los presupuestos municipales. Es decir, no se invirtieron una media de 20,3 millones cada año en los barrios, lo que supone que 6 de cada 10 euros prometidos no se destinaron a mejorar la ciudad. Para entendernos, el gobierno de Marea Atlántico gestionó el doble de peor que el anterior gobierno de los populares.
Seguro que a estas alturas piensan que no se puede gestionar peor este ayuntamiento. Pues se equivocan. En el período que gestionó Inés Rey (PSOE) han quedado sin ejecutar 147 millones de las inversiones aprobadas en los presupuestos municipales. Es decir, no se invirtieron una media de 49 millones cada año en los barrios, lo que supone que 7 de cada 10 euros prometidos no se
destinaron a mejorar la ciudad.
Llama la atención el balance catastrófico del año 2022, en el que los socialistas no fueron capaces de invertir la cifra 69,5 millones prometidos para los barrios. Un auténtico récord Guiness de
ineficacia y desidia.
Como conclusión, podemos afirmar que el gobierno de Inés Rey y Lage Tuñas gestionó cinco veces peor que el gobierno de los populares y el doble de peor que el de Marea Atlántica. Además, si realmente analizamos los cuatro años enteros, la cifra del presupuesto de inversiones que no se ha sabido gestionar llega a los 180 millones de euros. ¿Alguien se imagina todo lo que se podría haber mejorado todos los barrios de la ciudad con esa cifra astronómica? Por lo tanto, sólo podemos afirmar que esperamos no volver a decir: Peor imposible.
Un último apunte paradójico. El encargado principal de gestionar el presupuesto municipal es José Manuel Lage Tuñas, concejal de Economía, Hacienda y Régimen Interior del gobierno municipal. Si ha sido incapaz de invertir casi 150 millones del presupuesto de inversiones en los barrios, nos hacemos dos preguntas:
1. ¿Cómo se explica que haya acudido a 187 mesas de contratación en estos últimos cuatro años por las que ha cobrado casi 56.000 euros, además de su jugoso sueldo de 251.000 euros como diputado provincial en estos cuatro años?
2. Si las mesas de contratación a las que acude Lage Tuñas tienen una duración máxima de una hora, ¿significa esto que la hora de trabajo se cobra a casi 300 euros?
3. Si solo ha podido ejecutar el 30% de las inversiones prometidas en los barrios, entonces parece lógico que solo cobre 75.300 euros, que es lo que corresponde al 30% de su sueldo.
Todo indica que la productividad de este todopoderoso concejal deja mucho que desear. Es comprensible este bajo rendimiento, sabiendo que se ocupa más de conspirar en el PSdG y en la Diputación Provincial que de trabajar todas las horas en el Ayuntamiento de A Coruña para sacar los presupuestos adelante.
Los ciudadanos tienen la palabra el 28M.