Primero fueron los pisos en cantidades ascendentes en función de como se fuese caldeando el ambiente previo a las elecciones del 28M. Después los viajes en tren recorriendo toda España y Europa, reservados a los jóvenes, subvencionados al 90 y 50 por ciento respectivamente, que acaba de anunciar Sánchez empeñado en comprar su voto. O los 20.000 euros del ala que promete Yolanda Díaz a los que cumplan dieciocho años. Si repiten mandato, la factura de esas dádivas irá con cargo a la declaración que usted y yo presentemos en junio.

Todo ello y más no son sino un plagio de las propuestas de otros grupos políticos, pero superando la oferta, dando énfasis a la frase de «yo lo supero». Por si ello no fuese suficiente, el Ministerio de Yolanda Díaz promete, nada más y nada menos que, 20.000 euros a los jóvenes que cumplan 18 años, multiplicándolo por cien el «bono joven» de 200 que ofrece Sánchez. Si queridos amigos TODO DESDE EL MISMO GOBIERNO, es decir, los propios ministros se afanan en ser lo más de lo más.

Anuncia que esta medida denominada «herencia universal» se financiaría con un impuesto sobre patrimonio y sucesiones y cuyo coste final se calcula en 10.000 millones de euros.

En el tema de la vivienda, si hubiera sido una prioridad de tan alta consideración para el presidente del Gobierno, bien podía haberlo dicho antes y establecer un plan con anterioridad a la víspera de elecciones y una reforma del delito de okupación que otros países tienen erradicado promoviendo viviendas sociales y no ofreciendo humo. Existe un problema de credibilidad que pretende subsanarse con ofertas y promesas que solo tienen un objetivo: la compra de votos.

Por si ello fuese poco, nos encontramos que según el próximo presidente de Unión Europea (por cupo) y actual Presiente, España anuncia que las enseñanzas de Matemáticas y Tecnología deben realizarse con «perspectivas de género» además supongo que evitando el castellano. Añade en su comparecencia ante el V encuentro Internacional de Rectores que hay que hacer frente a la propagación de noticias falsas y bulos.

Esto también referirse a promesas electorales no cumplidas a aquello de sí «quiere se lo repito hasta cinco veces», no pactaremos con Bildu…

En fin, que sepan ustedes que el coste de todas esas promesas, irrealizables, de ser puestas en práctica…. ¿de dónde saldrían los eurillos?…de nuestros impuestos, eso sí, el Consejo de Ministros no «adelgazaría», ya que de ganar las elecciones tendría que ampliarse y aumentar los sillones por aquello de los pactos que NUNCA se realizarían…

No lo duden, la siguiente ronda las pagamos nosotros.