Antes de empezar, quiero dejar sentado que me da la impresión de que en el
ayuntamiento leen con atención este digital. Lo digo porque hace poco les envié una
foto de un banco (o lo que quedaba de él) situado al lado del ambulatorio de San José.
Me quejaba de que este banco estaba en una situación lamentable desde hace años y
que era una fiel imagen de la inutilidad del actual gobierno municipal.
Debieron de leer esta crítica y, ni cortos ni perezosos, tras años de desidia y abandono,
procedieron a arrancarlo de cuajo. Muerto el perro, se acabó la rabia, debieron de
pensar.
Solo hay dos problemas: que han dejado la acera levantada y seguro que algún usuario
del ambulatorio de San José que vaya despistado se parte la crisma, pero no hay
problema, hay médicos cerca. Y otro pequeño detalle, lo de sustituir el banco
desastroso por otro nuevo no lo contemplan ¿verdad?
Lo dicho, una banda de inútiles nos desgobierna en María Pita.