Denunciaba hace días otro lector que el reloj del Obelisco está parado desde hace meses y me empecé a fijar en el reloj del ayuntamiento.
No podía creer que el edificio que alberga al gobierno municipal también sufre la desidia de los que no saben gestionar los servicios públicos.
Aunque suene increíble, el reloj del ayuntamiento también está parado desde hace tiempo sin que la Alcaldesa, que lo ve cada día, haga nada para arreglarlo. Nada que no sepamos ya los coruñeses.