Enmarcado en las negociaciones de investidura de diferentes partidos políticos con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), saltó el titular del acuerdo ente Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) y los socialistas para investir como presidente del gobierno a Pedro Sánchez. Este acuerdo incluía importantes cesiones a Cataluña, pero en este artículo queremos centraros exclusivamente en la condonación de 15.000 millones de euros en concepto de deuda con el Estado a Cataluña.

Para explicar en detenimiento esta condonación, el pacto entre socialistas y republicanos catalanes especifica que “se procederá a tramitar una modificación legal que permita la asunción por parte del Estado de parte de la deuda autonómica”. El texto hecho público instrumenta que el Estado asumirá el 20% de la deuda vigente catalana a través del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) que se cifra en unos 15.000 millones de euros. Como Cataluña no tendrá que pagar intereses por esa deuda, sino que al transferirla al Estado será éste quien asuma su devengo, la Comunidad Autónoma de Cataluña se ahorrará unos 1.300 millones en concepto de pago por intereses de la deuda.

Al conocer el contenido del pacto, la indignación corrió rápidamente entre la totalidad de las restantes Comunidades Autónoma, independientemente del signo político de su gobierno. Ante esta respuesta airada, el ministro de la Presidencia del Gobierno, Félix Bolaños, anunció que el resto de las Comunidades Autónomas se podrán acoger a este mecanismo para guardar así “la igualdad de los españoles”.

Por ello, en este artículo se van a responder a varias preguntas: en primer lugar ¿qué es condonar una deuda? En segundo lugar ¿qué importancia tiene la condonación de deudas? Y, en tercer lugar, ¿quién paga esta orgía de gasto público?

Por lo que empezando a responder las preguntas relacionadas con el pacto de financiación firmado entre el PSOE y ERC para Cataluña lo primero que hay que ver es ¿qué es condonar una deuda? Condonar es perdonar al titular de un préstamos o crédito la totalidad o una parte de su saldo acreedor. Pongamos un ejemplo. Supongamos que en una familia el hijo llegado a la mayoría de edad se compra un coche; pasado el tiempo se da cuenta que los intereses del préstamo otorgados son muy altos puesto que su perfil carece de historial y de control presupuestario alguno. Con este panorama pide a la institución superior, sus padres, que se hagan cargo del préstamo sin que él haya cambiado su comportamiento de gastos y, por supuesto, continuando disfrutando del coche.

Visto el primer punto vamos a las consecuencias de condonar las deudas pues, ¿qué importancia tiene condonar una deuda? Ya hemos visto que cuando se condona una deuda total o parcialmente ya no hay que pagar intereses por ella mientras que se sigue disfrutando de la “inversión” de esa deuda condonada. Ahora bien, ¿qué sucede cuando existen varias entidades con la misma deuda y solo se la condonan a algunas? Pongamos un ejemplo con dos hermanos: Jaume y Paco. Los dos acaban de ingresar en el mercado laboral y tras unos meses con el mismo ahorro se deciden a comprar un coche. Jaume se decide por un BMW M3 de 60.000€ mientras que Paco se compra un Dacia Sandero de 15.000€ porque no le da para más. El coche de Jaume mola mucho más, pero resulta que tras unos meses se encuentra que la letra del préstamo es una losa importante. Ante esto, Jaume pide ayuda a la institución superior, sus padres, y éstos asumen parcialmente el préstamo de Jaume mientras él sigue disfrutando del coche. Al ver esto Paco, que era consciente en todo momento del coche que se quería comprar le pregunta indignado a sus padres ¿y yo?

Visto qué es condonar una deuda y qué consecuencias tiene en los entes a los que no se le condona una deuda, vamos a ver ahora quién paga todo esto. Para comenzar vamos a citar a Ángel de la Fuente, director ejecutivo de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA), quien enuncia que “la condonación de deuda es un desincentivo para controlar el gasto”. Siguiendo el ejemplo anterior, imagínense la cara de Paco cuando él ha hecho los deberes siendo consciente del coche que se podía comprar y resulta que al irresponsable de su hermano sus padres lo protegen. ¿Cómo actuará Paco la próxima vez ante una inversión sabiendo que sus padres estarán ahí para protegerlo?

Pues la respuesta rápida es que, siguiendo el ejemplo, los padres podrán aguantar mientras haya dinero detrás. Resolviendo la metáfora: Jaume es Cataluña o cualquier Comunidad Autónoma con déficit sistémico y Paco es Madrid o cualquier Comunidad Autónoma que cuadra el presupuesto fiscal. Sus padres son papá Estado, España. Por lo que, siguiendo el ejemplo, cada uno de los españoles estamos pagando el BMW de Jaume mientras que él sigue utilizándolo.

Y el problema principal no es que una entidad, que estaba incumpliendo sistemáticamente su presupuesto, sea respaldada; sino que se crea un incentivo adverso para no cuadrar las reglas fiscales y que todos estos excesos sean pagados por las generaciones siguientes a quienes tomaron estas decisiones. Generaciones que serán ajenas a cualquier decisión y nacerán con una losa de deuda encima de la cabeza sin haberlo merecido y sin recibir nada a cambio.

Por último, se pone en duda el principio de igualdad ante la ley que recoge la Constitución Española. Y es que, según dicta el Juzgado Mercantil nº 3 de Barcelona, en sentencia de 28 de julio de 2023; la magistrada Pellicer Ortiz interpreta que se debe rechazar el perdón de deudas si se exceden los 5.000 euros en multas fiscales. Es decir, que a particulares no es posible la condonación de deudas, pero a entidades mal administradas con fines políticos, sí.