Decenas de ciudadanos esperan desde hace años una licencia municipal de cambio de uso de un inmueble, mientras otros, con el uso y abuso de todos los medios a su alcance, toman un atajo. Estas licencias se han convertido en un artículo de lujo, como el oro verde, sólo alcance de unos cuantos. Por eso desde ASCEGA tenemos que idear alguna acción ‘solidaria’.
El cambio de uso de los inmuebles en tiempo y forma, a través de las licencias urbanísticas municipales, se ha convertido en un privilegio del que sólo pueden disfrutar unos cuantos en A Coruña. Léase José Manuel Lage Tuñas, que estos días aparece en los medios, cuando menos con un importante embrollo por cambiar el uso de una entreplanta comercial a dos viviendas.
Muchos son los ciudadanos que llevan esperando por una licencia urbanística de cambio de uso meses, años, y algunos hasta han superado el lustro. Sencillamente no hay derecho a jugar con los intereses y el dinero de los coruñeses, y tratar de saltarse a la torera procedimientos legales para llegar antes que nadie a la meta, haciendo uso y abuso de todos los medios al alcance por su condición de teniente de alcalde.
ASCEGA presentará hoy una iniciativa para equiparar las licencias de cambio de uso con el escaso y caro oro verde.
Las licencias municipales para el cambio de uso de los inmuebles se han convertido en un bien tan codiciado como el oro verde, sólo están alcance de unos cuantos privilegiados.
Por eso, desde ASCEGA se trabaja en una iniciativa que equipare los dos bienes, licencia urbanística de cambio de uso y aceite de oliva virgen extra. El objetivo final es muy sencillo y los lectores de este medio pronto lo conocerán. Permaneced expectantes.