Cuando las personas mayores vamos cumpliendo años, empezamos a comprender la importancia de tener aseos públicos cada cierto tramo y si, como es mi caso, necesito dar largas caminatas, todavía con mayor motivo.

Durante mucho tiempo, disponíamos de unos aseos de plástico en la zona del aparcamiento de la Torre de Hércules. No es que estuviesen muy limpios, a veces, y el olor era muy mejorable, pero algo es algo.

A mediados del año pasado observamos con alegría que se empezaba a construir un aseo moderno en la misma zona y esperamos con interés su puesta en funcionamiento. Nuestro gozo en un pozo. Después de estar instalado, lleva meses con el cartel que observan en la foto. No se puede utilizar porque no se ha conectado a las tuberías de agua. 

Un episodio propio de aquellos tebeos de Pepe Gotera y Otilio, como todo lo que hace este gobierno municipal.