A Conserveira Tradición denunció el desmantelamiento de su nave en A Pobra (A Coruña), donde vaciaron la instalación, destruyeron muebles y maquinaria incluso alquilada a otras empresas. Desaparecieron transformadores y cableados eléctricos, maquinaria fija y destrozaron baños, tejados y oficinas. Una primera valoración de los daños provocados se estima en dos millones y medio de euros, según el CEO de la empresa, Pascual Tarrón.
En la última semana, incluso horas antes de que A Conserveira A Tradición tomase posesión de la nave situada en el polígono industrial de A Tomada, en A Pobra do Caramiñal, los ocupantes procedieron al desmantelamiento.
A Conserveira Tradición tenía la intención de entrar inmediatamente en la nave para continuar en ella su actividad empresarial. Este jueves, y después de que se intentase en los últimos meses que los juzgados de Ribeira devolvieran la posesión de todos los bienes que se habían comprado, y por lo que depositaron en el juzgado más de 500.000 euros, los representantes de A Conserveira Tradición se encontraron con la situación detallada. Acudieron a tomar posesión de la nave, acompañados de agentes de la Guardia Civil y de una comisión judicial.
En julio de 2020, el grupo de empresas A Conserveira Tradición alquiló la conservera Luís Escurís Batalla SL. El año pasado las instalaciones del grupo fueron ocupadas por dos empresas: Brisiña Actemsa, último ocupante de la nave, y Luís Escurís Batalla SL, actualmente en fase investigación judicial, según informa A Conserveira Tradición.
Este viernes se tomaron las diligencias oportunas para revalorar los daños y presentar las querellas por daños, robo y alzamiento de bienes, indica A Conserveira Tradición en un comunicado.
